Tungurahua la provincia donde se expanden grupos criminales como los Lobos
Publicado el: 09/07/2024En los últimos años, la delincuencia organizada ha mostrado una notable adaptabilidad frente a las medidas implementadas por el gobierno para contener su avance. Las provincias costeras de Ecuador, como Guayas, Esmeraldas, El Oro y Manabí, han sido testigos de un constante estado de excepción, un recurso utilizado con el fin de frenar el auge delictivo. Sin embargo, estas medidas han tenido un efecto inesperado: la migración de organizaciones criminales hacia provincias menos vigiladas, con economías activas y menor presencia policial. Un claro ejemplo de esta problemática es la provincia de Tungurahua.
La decisión de militarizar varias ciudades costeras ha logrado contener temporalmente la violencia en ciertas zonas, pero esto no ha erradicado el problema de raíz. En su lugar, ha provocado el desplazamiento de los grupos delictivos hacia regiones menos protegidas. Según el mayor Edwin Escobar, jefe de la Policía Judicial de Tungurahua, “Tungurahua es una zona comercial estratégica”, lo que la convierte en un imán para las bandas en busca de nuevas áreas de influencia.
Ambato, la capital de Tungurahua, se ha visto especialmente afectada por esta migración delictiva. Su creciente movimiento comercial e industrial ha atraído a organizaciones criminales como la banda narcodelictiva "Los Lobos". Esta organización ha ganado terreno en zonas como Techo Propio, Letamendi y La Universal Bajo, en el sur de la ciudad, donde han establecido sus centros de operaciones.
El constante incremento de la actividad delictiva en la región ha llevado a las autoridades a intensificar sus esfuerzos para contrarrestar este fenómeno. Sin embargo, la expansión de estas bandas ha generado un clima de inseguridad en varias áreas, con habitantes que temen transitar tanto de día como de noche por las calles debido al riesgo de enfrentamientos entre delincuentes.
El avance del crimen organizado en Tungurahua es alarmante. En tan solo cuatro años, la provincia ha pasado de tener una actividad delictiva relativamente controlada a convertirse en un terreno fértil para el crecimiento de bandas criminales. En la actualidad, se han identificado 22 organizaciones delictivas activas en la provincia, un incremento significativo en comparación con las 19 registradas el año anterior.
La Policía ha detectado que muchas de estas bandas son fragmentaciones de "Los Lobos", una organización que ha extendido su influencia por varias regiones del país. Algunas de estas nuevas facciones adoptan el nombre de "Los Lobos" para despistar las investigaciones, mientras que otras lo hacen simplemente para intimidar a sus víctimas.
Este aumento de la actividad criminal ha derivado en un mayor número de detenciones. Según las estadísticas proporcionadas por la Policía de Tungurahua, las capturas han pasado de 228 en 2023 a 251 en lo que va de 2024. A pesar de estos esfuerzos, el control total sobre la situación sigue siendo un desafío.
Los barrios del sur de Ambato, como Techo Propio, Letamendi, La Universal Bajo y Pasochoa, se han convertido en el escenario principal de las actividades delictivas. En estos sectores, los enfrentamientos entre bandas rivales y la extorsión son moneda corriente. Los residentes viven bajo la constante amenaza de la violencia, temiendo convertirse en víctimas colaterales de los tiroteos o ser objetivo de extorsiones.
El barrio La Universal ha sido uno de los más afectados por esta situación. El 31 de julio de 2024, la Policía logró capturar a once integrantes de una banda que se dedicaba al microtráfico, asalto y extorsión en la zona. Esta operación fue un golpe significativo para el grupo, pero no logró desarticular completamente la estructura criminal que opera en el área.
Los Lobos: una amenaza en expansión
La organización delictiva "Los Lobos" ha sido señalada como una de las principales responsables del incremento de la violencia en Tungurahua. Esta banda, que anteriormente operaba con mayor fuerza en otras provincias, ha trasladado parte de sus operaciones a Ambato, buscando consolidar su control en el sur de la ciudad.
El 8 de agosto de 2024, tres integrantes de "Los Lobos" fueron capturados por la Policía tras haber cometido tres homicidios en menos de 24 horas. Estos crímenes estaban relacionados con casos de extorsión y microtráfico, actividades clave para el financiamiento de la organización. La violencia asociada al narcotráfico ha ido en aumento, con 29 muertes violentas registradas en los primeros ocho meses del año, en comparación con las 32 de todo 2023.
La respuesta policial ante el incremento del crimen
Ante esta escalada de violencia, la Policía de Tungurahua ha intensificado sus operaciones para hacer frente a las bandas criminales. La Subzona de Policía de Tungurahua juega un papel crucial en la contención de la delincuencia, realizando operativos constantes en las zonas más afectadas. A pesar de estos esfuerzos, la expansión de "Los Lobos" y otras bandas sigue representando un desafío para las autoridades.
La lucha contra el crimen organizado en Tungurahua es un ejemplo claro de cómo las dinámicas delictivas pueden adaptarse y evolucionar frente a las estrategias de seguridad implementadas por el Estado. La migración de bandas hacia nuevas regiones demuestra que la militarización y los estados de excepción no son soluciones definitivas, sino paliativos temporales.
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