Renuncian medicos de Ecuador por politica de salud
Acaban de renunciar todos los médicos radiólogos de los hospitales del IESS.
La medida es la primera de otras que vendrán a nivel nacional para rechazar la política neoliberal en salud impuesta por el gobierno de la revolución ciudadana.
La Federación Médica Ecuatoriana denunció que la declaración de emergencias sanitarias además de servir para hacer grandes compras sin mayor control, tuvo como objetivo ocultar el estancamiento en el gasto público en salud. Desde el año 2008 al presente no hay incremento del presupuesto pero que el gobierno aparenta que hacia grandes inversiones, dice el gremio.
Además dice que a partir del año 2011, una vez conseguida la adhesión y embelesamiento de algunos intelectuales, dirigentes de movimientos social y de sectores de la población, se replican tres pilares de la política neoliberal: la flexibilización laboral, es decir, incremento de la sobre explotación de los profesionales de la salud, aumenta de la jornada laboral y reducción de remuneraciones: privatización y tercerización de servicios a través de la canalización de recursos públicos para la compra de servicios a empresas privadas; y el despido no motivado de trabajadores de la salud.
La Federación Medica, dice un comunicado publicado en medios impresos, exige una jornada de trabajo de seis horas para evitar el deterioro de la salud de los médicos por desgaste profesional o cansancio crónico – síndrome de burnout que llega a una prevalencia del 18% en médicos de Pichincha- incremento de riesgo de muerte prematura por infartos y accidentes cerebro vasculares. También la reducción de la jornada evitará poner en riesgo la salud y vida de los pacientes, ya que los médicos después de trabajar 6 horas seguridad, corren el riesgo de cometer errores y finalmente porque los trabajadores de contrato colectivo trabajan menos de 120 horas al mes, lo cual es discriminatorio,agrega el manifiesto.
También denuncian que los médicos trabajan en condiciones inadecuadas puesto que el 60% de las unidades medicas del Ministerio de Salud no reúnen los requisitos de infraestructura, insumos, equipos y medicamentos necesarios para realizar una práctica médica adecuada. Estos factores han provocado que médicos y especialistas hayan renunciado paulatinamente por la errada política gubernamental, de oídos sordos y de prepotencia. A esto se añade que médicos radiólogos del hospital Carlos Andrade Marín hayan renunciado masivamente como expresión de indignación ante la violación sistemática de derechos.
Los médicos exigen al presidente Correa consecuencia con su discurso anti neoliberal y emita el respectivo decreto de jornada especial reducida de máximo 6 horas diarias para los profesionales de la salud.
AGENCIA ANE
La medida es la primera de otras que vendrán a nivel nacional para rechazar la política neoliberal en salud impuesta por el gobierno de la revolución ciudadana.
La Federación Médica Ecuatoriana denunció que la declaración de emergencias sanitarias además de servir para hacer grandes compras sin mayor control, tuvo como objetivo ocultar el estancamiento en el gasto público en salud. Desde el año 2008 al presente no hay incremento del presupuesto pero que el gobierno aparenta que hacia grandes inversiones, dice el gremio.
Además dice que a partir del año 2011, una vez conseguida la adhesión y embelesamiento de algunos intelectuales, dirigentes de movimientos social y de sectores de la población, se replican tres pilares de la política neoliberal: la flexibilización laboral, es decir, incremento de la sobre explotación de los profesionales de la salud, aumenta de la jornada laboral y reducción de remuneraciones: privatización y tercerización de servicios a través de la canalización de recursos públicos para la compra de servicios a empresas privadas; y el despido no motivado de trabajadores de la salud.
La Federación Medica, dice un comunicado publicado en medios impresos, exige una jornada de trabajo de seis horas para evitar el deterioro de la salud de los médicos por desgaste profesional o cansancio crónico – síndrome de burnout que llega a una prevalencia del 18% en médicos de Pichincha- incremento de riesgo de muerte prematura por infartos y accidentes cerebro vasculares. También la reducción de la jornada evitará poner en riesgo la salud y vida de los pacientes, ya que los médicos después de trabajar 6 horas seguridad, corren el riesgo de cometer errores y finalmente porque los trabajadores de contrato colectivo trabajan menos de 120 horas al mes, lo cual es discriminatorio,agrega el manifiesto.
También denuncian que los médicos trabajan en condiciones inadecuadas puesto que el 60% de las unidades medicas del Ministerio de Salud no reúnen los requisitos de infraestructura, insumos, equipos y medicamentos necesarios para realizar una práctica médica adecuada. Estos factores han provocado que médicos y especialistas hayan renunciado paulatinamente por la errada política gubernamental, de oídos sordos y de prepotencia. A esto se añade que médicos radiólogos del hospital Carlos Andrade Marín hayan renunciado masivamente como expresión de indignación ante la violación sistemática de derechos.
Los médicos exigen al presidente Correa consecuencia con su discurso anti neoliberal y emita el respectivo decreto de jornada especial reducida de máximo 6 horas diarias para los profesionales de la salud.
AGENCIA ANE
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