Los cinco niveles de penetración del caso metástasis
OPINIÓN | Por: Crnl. Mario R. Pazmiño Silva
En menos de tres décadas, el Ecuador se ha convertido en el santuario del crimen organizado trasnacional. La ineficiencia y la complicidad de diferentes gobiernos facilitaron la penetración de las estructuras delictivas y se adaptaron para convivir a su servicio.
Las estructuras del crimen organizado, previo a instalarse en un país, lo estudian. Poco a poco, Ecuador cumplió los requisitos: fronteras altamente permeables, corrupción galopante, facilidades para el lavado de activos, compra de conciencias -especialmente en los altos niveles de los operadores de justicia-. El país, como plus, tiene una economía dolarizada.
El crimen organizado inició su penetración luego del efecto mercurio o globo, que arrancó en el nuevo siglo. Y para hacerlo ha empleado cinco tipos de estrategias para destruir la estructura del Estado:
Penetración del estamento gubernamental, a través de los procesos electorales, con la compra de conciencia de candidatos a diferentes dignidades. El crimen organizado invierte fuertes cantidades de dinero para posicionar a sus futuros testaferros a un cargo en la función pública, para luego exigirle les devuelva el favor con contratos que les permitan lavar el dinero del narcotráfico o de otros delitos conexos.
Penetración de los estamentos de control, con la infiltración de las estructuras policiales, militares, aduaneras, aeroportuarias, de control carcelario, de la unidad de análisis financiero, etc. Su finalidad es obtener información rápida y previa de operativos o acciones de las fuerzas del orden en contra de ellos.
Penetración de los operadores de justica, es la más importante para los dirigentes y cabecillas del crimen organizado. Al comprar la conciencia de jueces y fiscales aseguran su operatividad y la impunidad de sus acciones. Un ejemplo palpable es el caso Metástasis, con las graves implicaciones de corrupción y comprometimiento de altos funcionarios judiciales.
Penetración del sistema financiero nacional, la corrupción y los graves niveles de lavado de dinero, inyectados permanentemente al sistema financiero nacional, debilitan la economía del Estado. En nuestro país, de un día para otro, aparecen empresarios con fuertes cantidades de dinero que instalan un sinnúmero de negocios sin la adecuada investigación financiera de la procedencia de los capitales.
Penetración del estamento social, en esta etapa, el crimen organizado está casi consolidado en el escenario nacional e inicia el reclutamiento de ciudadanos, a cambio de dinero, amenazas o droga, para consolidar espacios territoriales - llamados santuarios-, donde imponen una gobernanza criminal. En estas zonas, las organizaciones delictivas desplazan a la fuerza pública e instituciones estatales y asumen el gobierno territorial. Ahí imponen vacunas, extorsiones a la población, a vista y paciencia de las organizaciones estatales que miran con indiferencia y complicidad.
El operativo Metástasis, ejecutado por una valiente Fiscal General, es una muestra del nivel de penetración del crimen organizado en todas las funciones e instituciones estatales, en una sociedad que camina a pasos agigantados a ser un Estado fallido.
En menos de tres décadas, el Ecuador se ha convertido en el santuario del crimen organizado trasnacional. La ineficiencia y la complicidad de diferentes gobiernos facilitaron la penetración de las estructuras delictivas y se adaptaron para convivir a su servicio.
Las estructuras del crimen organizado, previo a instalarse en un país, lo estudian. Poco a poco, Ecuador cumplió los requisitos: fronteras altamente permeables, corrupción galopante, facilidades para el lavado de activos, compra de conciencias -especialmente en los altos niveles de los operadores de justicia-. El país, como plus, tiene una economía dolarizada.
El crimen organizado inició su penetración luego del efecto mercurio o globo, que arrancó en el nuevo siglo. Y para hacerlo ha empleado cinco tipos de estrategias para destruir la estructura del Estado:
Penetración del estamento gubernamental, a través de los procesos electorales, con la compra de conciencia de candidatos a diferentes dignidades. El crimen organizado invierte fuertes cantidades de dinero para posicionar a sus futuros testaferros a un cargo en la función pública, para luego exigirle les devuelva el favor con contratos que les permitan lavar el dinero del narcotráfico o de otros delitos conexos.
Penetración de los estamentos de control, con la infiltración de las estructuras policiales, militares, aduaneras, aeroportuarias, de control carcelario, de la unidad de análisis financiero, etc. Su finalidad es obtener información rápida y previa de operativos o acciones de las fuerzas del orden en contra de ellos.
Penetración de los operadores de justica, es la más importante para los dirigentes y cabecillas del crimen organizado. Al comprar la conciencia de jueces y fiscales aseguran su operatividad y la impunidad de sus acciones. Un ejemplo palpable es el caso Metástasis, con las graves implicaciones de corrupción y comprometimiento de altos funcionarios judiciales.
Penetración del sistema financiero nacional, la corrupción y los graves niveles de lavado de dinero, inyectados permanentemente al sistema financiero nacional, debilitan la economía del Estado. En nuestro país, de un día para otro, aparecen empresarios con fuertes cantidades de dinero que instalan un sinnúmero de negocios sin la adecuada investigación financiera de la procedencia de los capitales.
Penetración del estamento social, en esta etapa, el crimen organizado está casi consolidado en el escenario nacional e inicia el reclutamiento de ciudadanos, a cambio de dinero, amenazas o droga, para consolidar espacios territoriales - llamados santuarios-, donde imponen una gobernanza criminal. En estas zonas, las organizaciones delictivas desplazan a la fuerza pública e instituciones estatales y asumen el gobierno territorial. Ahí imponen vacunas, extorsiones a la población, a vista y paciencia de las organizaciones estatales que miran con indiferencia y complicidad.
El operativo Metástasis, ejecutado por una valiente Fiscal General, es una muestra del nivel de penetración del crimen organizado en todas las funciones e instituciones estatales, en una sociedad que camina a pasos agigantados a ser un Estado fallido.
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