Jorge Zavala: no hay jueces sino funcionarios al servicio de este Gobierno
Ya tengo todos los fallos absurdos, aberrantes, que se dictaron para no afectar las acciones cautelares que se pidieron contra el Gobierno. Eso es lo que vive el Ecuador hoy y lo que motiva a la indignación", dice el jurista guayaquileño sobre el contenido de su nueva obra "El Leviatán Judicial".
- El título de su nuevo libro "El Leviatán Judicial" llama mucho la atención. ¿Hay relación entre un monstruo demoníaco y la Justicia?
- En el trasfondo de la carátula aparece el monstruo, que fue una figura mítica inventada por un filósofo para describir al estado moderno que absorbe todo, y por eso escribió El Leviatán. Lo que he hecho es asimilar eso a lo que ocurre en el país con el Poder Judicial. Han creado un monstruo en manos del Ejecutivo, que tiene dos finalidades elementales: defenderse con jueces propios de toda acción judicial que hubiese contra funcionarios del Gobierno. Y la otra: atacar, precisamente a los enemigos.
- ¿El texto es de orientación jurídica, política o ambas?
- Es un libro denuncia que compone la finalidad política de apropiarse de lo jurídico del país. Es hacer monolítico un poder que no tenga un contrapoder que debería ser el Judicial. La función del juez es someter el poder al derecho, para eso se requieren jueces independientes pero acá se quiere tener a los jueces en sus manos.
- ¿Esa troika de la que habla en el libro para referirse a los vocales del Consejo de la Judicatura está realmente detrás de todos los autos, sentencias y resoluciones?
- Sí, señor, las pruebas son evidentes. "Jueces que no obedezcan serán sancionados", dicen los memorandos de este organismo y ya comenzó. ¿Por qué descalificaron del concurso para la nueva Corte Nacional de Justicia a una jueza de trayectoria como Grace Campoverde?, simplemente porque aceptó una acción de protección contra el ministro de Justicia. Pruebas hay muchas más que iré publicando poco a poco. Lo que quiero demostrar a la conciencia de América Latina es que no tenemos jueces, sino funcionarios al servicio del Gobierno que dictan sentencias.
- ¿Por qué ha tomado esta bandera de denuncia y protesta?
- Porque la abolición del poder judicial independiente significa la conculcación de todas las libertades de todos los ecuatorianos. Yo como Jorge Zavala, a mi edad y desarrollo profesional y político, no creo que el silencio sea suficiente. Nos hemos retirado de la política pero si hay que regresar para enfrentar a los que quieren conculcar las libertades, habrá que hacerlo.
- ¿Usted ha sido crítico de este régimen. ¿Existe una persecución en su contra por eso?
- Sí, llámelo investigación o persecución. Puedo mostrar los documentos del Servicio de Rentas, pidiéndole a todos los registradores de la propiedad, mercantiles y a mí mismo, información de todo lo que respecta a mí, a mi señora y mis cinco hijos. Hace cuatro días, de nuevo, recibí un oficio del SRI preguntándome hasta lo que gasto en papel. Sé que eso se viene, estamos ante un gobierno fascista.
- ¿Intimidación?
- ¡Sí, claro!, la idea es intimidar, silenciarme, por eso he decidido enfrentar a los sepultureros de las libertades y si hay que pagar las consecuencias, las pagaré.
- ¿Pero cómo va a enfrentarlos?
-Confío ciegamente en el instinto de supervivencia de los ecuatorianos. La única protección que tengo son mis conocimientos y eso es suficiente, por eso es que la denuncia no es solo para el Ecuador, el libro ha llegado también a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que me lo ha pedido y vamos a comenzar un ciclo de conferencias de lo que sucede en el Ecuador con el Poder Judicial. Será en noviembre dentro y fuera del país, porque la abolición de las libertades es un problema americano y no solo ecuatoriano.
- ¿Por qué no esperar a que termine el mandato de 18 meses de esta Judicatura y ver qué pasa?
- Es cierto que la transición es hasta diciembre, pero dejan jueces permanentes. Ese fue el truco: "Solo por 18 meses permítanos ganar la confianza", le dijeron al pueblo, pero no le dijeron que dejaban jueces para seis años en beneficio de sus fines políticos, lo cual fue un engaño, una traición.
- ¿Qué le dicen sus lectores?
- Que el texto tiene mucha acogida porque es un mensaje para América y el mundo de lo que está ocurriendo en el Ecuador.
Jorge Alvarado - Guayaquil
- El título de su nuevo libro "El Leviatán Judicial" llama mucho la atención. ¿Hay relación entre un monstruo demoníaco y la Justicia?
- En el trasfondo de la carátula aparece el monstruo, que fue una figura mítica inventada por un filósofo para describir al estado moderno que absorbe todo, y por eso escribió El Leviatán. Lo que he hecho es asimilar eso a lo que ocurre en el país con el Poder Judicial. Han creado un monstruo en manos del Ejecutivo, que tiene dos finalidades elementales: defenderse con jueces propios de toda acción judicial que hubiese contra funcionarios del Gobierno. Y la otra: atacar, precisamente a los enemigos.
- ¿El texto es de orientación jurídica, política o ambas?
- Es un libro denuncia que compone la finalidad política de apropiarse de lo jurídico del país. Es hacer monolítico un poder que no tenga un contrapoder que debería ser el Judicial. La función del juez es someter el poder al derecho, para eso se requieren jueces independientes pero acá se quiere tener a los jueces en sus manos.
- ¿Esa troika de la que habla en el libro para referirse a los vocales del Consejo de la Judicatura está realmente detrás de todos los autos, sentencias y resoluciones?
- Sí, señor, las pruebas son evidentes. "Jueces que no obedezcan serán sancionados", dicen los memorandos de este organismo y ya comenzó. ¿Por qué descalificaron del concurso para la nueva Corte Nacional de Justicia a una jueza de trayectoria como Grace Campoverde?, simplemente porque aceptó una acción de protección contra el ministro de Justicia. Pruebas hay muchas más que iré publicando poco a poco. Lo que quiero demostrar a la conciencia de América Latina es que no tenemos jueces, sino funcionarios al servicio del Gobierno que dictan sentencias.
- ¿Por qué ha tomado esta bandera de denuncia y protesta?
- Porque la abolición del poder judicial independiente significa la conculcación de todas las libertades de todos los ecuatorianos. Yo como Jorge Zavala, a mi edad y desarrollo profesional y político, no creo que el silencio sea suficiente. Nos hemos retirado de la política pero si hay que regresar para enfrentar a los que quieren conculcar las libertades, habrá que hacerlo.
- ¿Usted ha sido crítico de este régimen. ¿Existe una persecución en su contra por eso?
- Sí, llámelo investigación o persecución. Puedo mostrar los documentos del Servicio de Rentas, pidiéndole a todos los registradores de la propiedad, mercantiles y a mí mismo, información de todo lo que respecta a mí, a mi señora y mis cinco hijos. Hace cuatro días, de nuevo, recibí un oficio del SRI preguntándome hasta lo que gasto en papel. Sé que eso se viene, estamos ante un gobierno fascista.
- ¿Intimidación?
- ¡Sí, claro!, la idea es intimidar, silenciarme, por eso he decidido enfrentar a los sepultureros de las libertades y si hay que pagar las consecuencias, las pagaré.
- ¿Pero cómo va a enfrentarlos?
-Confío ciegamente en el instinto de supervivencia de los ecuatorianos. La única protección que tengo son mis conocimientos y eso es suficiente, por eso es que la denuncia no es solo para el Ecuador, el libro ha llegado también a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que me lo ha pedido y vamos a comenzar un ciclo de conferencias de lo que sucede en el Ecuador con el Poder Judicial. Será en noviembre dentro y fuera del país, porque la abolición de las libertades es un problema americano y no solo ecuatoriano.
- ¿Por qué no esperar a que termine el mandato de 18 meses de esta Judicatura y ver qué pasa?
- Es cierto que la transición es hasta diciembre, pero dejan jueces permanentes. Ese fue el truco: "Solo por 18 meses permítanos ganar la confianza", le dijeron al pueblo, pero no le dijeron que dejaban jueces para seis años en beneficio de sus fines políticos, lo cual fue un engaño, una traición.
- ¿Qué le dicen sus lectores?
- Que el texto tiene mucha acogida porque es un mensaje para América y el mundo de lo que está ocurriendo en el Ecuador.
Jorge Alvarado - Guayaquil
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