Presidente Noboa dispone condonación de deudas del Banco Nacional de Fomento de hasta $5.000
El 6 de septiembre de 2024, desde Nueva York, donde el presidente realiza una gira internacional que incluye Canadá, se emitió el Decreto Ejecutivo 383. Este decreto formaliza la condonación de deudas para aquellos créditos del Banco Nacional de Fomento que cumplen con criterios específicos. Estos créditos, muchos de los cuales fueron registrados antes de la liquidación de la entidad en 2016, están catalogados como incobrables debido a la falta de garantías reales y su clasificación en la categoría de riesgo "E".
El Banco Nacional de Fomento, que ha estado en proceso de liquidación desde 2016, emitió un informe técnico el 23 de agosto del mismo año. En este documento, se recomendaba la condonación de deudas de hasta $5.000 siempre que estas sean consideradas recuperables, lo que sentó las bases para el decreto firmado por el presidente Noboa. La condonación se aplicará solo a aquellas operaciones que cumplan con las condiciones especificadas y que puedan ser verificadas documentalmente.
El decreto no es solo un alivio financiero para los deudores, sino también una estrategia política y económica que busca inyectar confianza en el sistema financiero y en el gobierno actual. Según el presidente Noboa, esta medida representa $134 millones en alivio financiero para el país.
En sus redes sociales, Noboa fue claro al afirmar que esta acción es una muestra de voluntad política. Según él, Ecuador no carecía de oportunidades, sino de una dirección política dispuesta a tomar decisiones que favorezcan a los más necesitados. En este sentido, la condonación de las deudas representa una nueva etapa para el país. El presidente expresó lo siguiente:
> “A este país no le hacían falta oportunidades, sino voluntad política. He dispuesto que no se te cobre más y que los créditos de hasta $5.000 en el Banco Nacional de Fomento sean condonados. Son $134 millones en alivio financiero para los ecuatorianos que han estado esperando por un gobierno que crea en ellos”, aseguró Noboa desde Nueva York.
La deuda coactiva y en fase de apremio representa una carga significativa para muchas familias ecuatorianas que, debido a la falta de recursos, no han podido cumplir con sus obligaciones financieras. Con la condonación de deudas de hasta $5.000, muchas de estas familias podrán finalmente liberarse de una carga que ha obstaculizado su desarrollo económico y social. Este alivio permitirá que los ciudadanos beneficiados puedan enfocar sus recursos en otras áreas, como el consumo, la inversión en sus negocios o la educación de sus hijos.
La decisión del presidente Noboa también tiene un impacto positivo en la confianza de los ciudadanos hacia el gobierno y el sistema financiero. Al abordar una problemática que ha afectado a tantas personas, el gobierno actual envía un mensaje claro: las necesidades del pueblo están siendo atendidas de manera efectiva y oportuna. Esta medida podría fortalecer la percepción de un gobierno comprometido con el bienestar de sus ciudadanos.
Si bien la condonación de deudas podría generar preocupación en algunos sectores, especialmente en el ámbito financiero, es importante destacar que los créditos condonados son aquellos que ya habían sido provisionados por el Banco Nacional de Fomento y que no contaban con garantías reales para su recuperación. En otras palabras, estos créditos ya representaban pérdidas para la entidad financiera, y su condonación no debería generar un impacto negativo significativo en la estabilidad del sistema financiero.
No todos los créditos serán condonados automáticamente. La condonación solo se aplicará a aquellos créditos que cumplan con los criterios establecidos en el decreto presidencial. Esto incluye, entre otros requisitos, que los créditos hayan sido calificados con riesgo “E” y que no cuenten con garantías reales. Además, la verificación documental será un paso crucial para garantizar que los beneficiarios cumplen con las condiciones necesarias para acceder a esta medida.
La condonación se aplicará únicamente a las operaciones registradas hasta la fecha de publicación del Decreto Ejecutivo 383, es decir, aquellas deudas que ya estaban en el sistema antes del 6 de septiembre de 2024. Esto asegura que el alcance de la medida sea controlado y que no se generen nuevas deudas a condonar bajo este decreto.
La firma del decreto desde Nueva York no fue un evento aislado. Forma parte de una agenda más amplia que incluye una gira internacional del presidente Noboa por Estados Unidos y Canadá. Esta gira tiene como objetivo reforzar las relaciones diplomáticas y comerciales con ambos países, lo que también puede tener un impacto positivo en la economía ecuatoriana a largo plazo.
La capacidad de Noboa para gestionar tanto los asuntos internos como los internacionales de manera simultánea refuerza su imagen como un líder capaz de abordar los problemas del país desde múltiples frentes.
Foto: Cuenta de X de la Presidencia Ecuador.
El Banco Nacional de Fomento, que ha estado en proceso de liquidación desde 2016, emitió un informe técnico el 23 de agosto del mismo año. En este documento, se recomendaba la condonación de deudas de hasta $5.000 siempre que estas sean consideradas recuperables, lo que sentó las bases para el decreto firmado por el presidente Noboa. La condonación se aplicará solo a aquellas operaciones que cumplan con las condiciones especificadas y que puedan ser verificadas documentalmente.
El decreto no es solo un alivio financiero para los deudores, sino también una estrategia política y económica que busca inyectar confianza en el sistema financiero y en el gobierno actual. Según el presidente Noboa, esta medida representa $134 millones en alivio financiero para el país.
En sus redes sociales, Noboa fue claro al afirmar que esta acción es una muestra de voluntad política. Según él, Ecuador no carecía de oportunidades, sino de una dirección política dispuesta a tomar decisiones que favorezcan a los más necesitados. En este sentido, la condonación de las deudas representa una nueva etapa para el país. El presidente expresó lo siguiente:
> “A este país no le hacían falta oportunidades, sino voluntad política. He dispuesto que no se te cobre más y que los créditos de hasta $5.000 en el Banco Nacional de Fomento sean condonados. Son $134 millones en alivio financiero para los ecuatorianos que han estado esperando por un gobierno que crea en ellos”, aseguró Noboa desde Nueva York.
La deuda coactiva y en fase de apremio representa una carga significativa para muchas familias ecuatorianas que, debido a la falta de recursos, no han podido cumplir con sus obligaciones financieras. Con la condonación de deudas de hasta $5.000, muchas de estas familias podrán finalmente liberarse de una carga que ha obstaculizado su desarrollo económico y social. Este alivio permitirá que los ciudadanos beneficiados puedan enfocar sus recursos en otras áreas, como el consumo, la inversión en sus negocios o la educación de sus hijos.
La decisión del presidente Noboa también tiene un impacto positivo en la confianza de los ciudadanos hacia el gobierno y el sistema financiero. Al abordar una problemática que ha afectado a tantas personas, el gobierno actual envía un mensaje claro: las necesidades del pueblo están siendo atendidas de manera efectiva y oportuna. Esta medida podría fortalecer la percepción de un gobierno comprometido con el bienestar de sus ciudadanos.
Si bien la condonación de deudas podría generar preocupación en algunos sectores, especialmente en el ámbito financiero, es importante destacar que los créditos condonados son aquellos que ya habían sido provisionados por el Banco Nacional de Fomento y que no contaban con garantías reales para su recuperación. En otras palabras, estos créditos ya representaban pérdidas para la entidad financiera, y su condonación no debería generar un impacto negativo significativo en la estabilidad del sistema financiero.
No todos los créditos serán condonados automáticamente. La condonación solo se aplicará a aquellos créditos que cumplan con los criterios establecidos en el decreto presidencial. Esto incluye, entre otros requisitos, que los créditos hayan sido calificados con riesgo “E” y que no cuenten con garantías reales. Además, la verificación documental será un paso crucial para garantizar que los beneficiarios cumplen con las condiciones necesarias para acceder a esta medida.
La condonación se aplicará únicamente a las operaciones registradas hasta la fecha de publicación del Decreto Ejecutivo 383, es decir, aquellas deudas que ya estaban en el sistema antes del 6 de septiembre de 2024. Esto asegura que el alcance de la medida sea controlado y que no se generen nuevas deudas a condonar bajo este decreto.
La firma del decreto desde Nueva York no fue un evento aislado. Forma parte de una agenda más amplia que incluye una gira internacional del presidente Noboa por Estados Unidos y Canadá. Esta gira tiene como objetivo reforzar las relaciones diplomáticas y comerciales con ambos países, lo que también puede tener un impacto positivo en la economía ecuatoriana a largo plazo.
La capacidad de Noboa para gestionar tanto los asuntos internos como los internacionales de manera simultánea refuerza su imagen como un líder capaz de abordar los problemas del país desde múltiples frentes.
Foto: Cuenta de X de la Presidencia Ecuador.
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