Quito rebaja impuestos a 11 días de las elecciones
El oficialismo aprieta por la candidatura de Barrera - El candidato pide el voto a la tercera edad - Correa denuncia una maniobra desestabilizadora
La estrategia electoral del oficialismo en Quito da un giro radical. El alcalde encargado, Jorge Albán, anuncia una bajada de impuestos y el presidente envía una carta a sus bases en la que pide por el voto para el candidato de su partido, Augusto Barrera.
El martes en la noche se hizo pública, en redes sociales, una carta y un vídeo del mandatario, como titular de AP. El mensaje fue claro: el enemigo quiere desestabilizar al Gobierno desde Quito.
Dijo que nota dubitación entre los militantes ante "el deber que tenemos que cumplir" de votar por Barrera. Según él, las ofertas de Mauricio Rodas, candidato de SUMA, de reducir impuestos eran oportunistas. Eso sería regresar al 99, "cuando nos quebraron al país".
Horas después la estrategia cambió. Atrás quedaron las críticas a la baja de impuestos. Las quejas del presidente las borró el vicealcalde. Jorge Albán, anunció, ayer a primera hora, que el Municipio bajará multas y peajes. (Ver recuadro)
La medida se hizo pública en una cadena radial ordenada por la Secom. Las últimas encuestas muestran que Rodas le pisa los talones a Barrera, incluso que ya lo superó.
El candidato de SUMA, desde su sede, sonreía. Sin ser aún alcalde había cumplido parte de sus propuestas: logró que el cabildo disminuya las multas. Eso evidencia que sus propuestas son viables, dijo. Lamentó que cinco años se haya cobrado ese dinero a los quiteños y ahora nadie se los va a devolver.
A pocas cuadras de distancia en el Parque La Carolina, Barrera pedía a los ciudadanos de la tercera edad, que por favor vayan a votar, aunque sea facultativo. Que, como jefes de familia, se aseguren que los suyos voten "todo todito 35".
Aunque Rodas luce confiado, anunció que cuidará los votos: unas 7.000 personas se encargarán de la tarea el próximo 23 de febrero.
El oficialismo, en cambio, recurre a su máxima figura. El presidente Correa tiene una larga agenda hoy en la capital. Desayuno, almuerzo y recorridos... Ya lo ha hecho últimamente, y ha hablado de lo buen alcalde que es Barrera y de lo mala que sería la administración de la oposición. Pero parece no ser suficiente: las cadenas de la Secom sobre las obras del Municipio se multiplican.
Adriana Noboa Arregui
La estrategia electoral del oficialismo en Quito da un giro radical. El alcalde encargado, Jorge Albán, anuncia una bajada de impuestos y el presidente envía una carta a sus bases en la que pide por el voto para el candidato de su partido, Augusto Barrera.
El martes en la noche se hizo pública, en redes sociales, una carta y un vídeo del mandatario, como titular de AP. El mensaje fue claro: el enemigo quiere desestabilizar al Gobierno desde Quito.
Dijo que nota dubitación entre los militantes ante "el deber que tenemos que cumplir" de votar por Barrera. Según él, las ofertas de Mauricio Rodas, candidato de SUMA, de reducir impuestos eran oportunistas. Eso sería regresar al 99, "cuando nos quebraron al país".
Horas después la estrategia cambió. Atrás quedaron las críticas a la baja de impuestos. Las quejas del presidente las borró el vicealcalde. Jorge Albán, anunció, ayer a primera hora, que el Municipio bajará multas y peajes. (Ver recuadro)
La medida se hizo pública en una cadena radial ordenada por la Secom. Las últimas encuestas muestran que Rodas le pisa los talones a Barrera, incluso que ya lo superó.
El candidato de SUMA, desde su sede, sonreía. Sin ser aún alcalde había cumplido parte de sus propuestas: logró que el cabildo disminuya las multas. Eso evidencia que sus propuestas son viables, dijo. Lamentó que cinco años se haya cobrado ese dinero a los quiteños y ahora nadie se los va a devolver.
A pocas cuadras de distancia en el Parque La Carolina, Barrera pedía a los ciudadanos de la tercera edad, que por favor vayan a votar, aunque sea facultativo. Que, como jefes de familia, se aseguren que los suyos voten "todo todito 35".
Aunque Rodas luce confiado, anunció que cuidará los votos: unas 7.000 personas se encargarán de la tarea el próximo 23 de febrero.
El oficialismo, en cambio, recurre a su máxima figura. El presidente Correa tiene una larga agenda hoy en la capital. Desayuno, almuerzo y recorridos... Ya lo ha hecho últimamente, y ha hablado de lo buen alcalde que es Barrera y de lo mala que sería la administración de la oposición. Pero parece no ser suficiente: las cadenas de la Secom sobre las obras del Municipio se multiplican.
Adriana Noboa Arregui
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Tags: Quito