Asesinaron con 50 disparos a un supuesto delator

La Policía identificó como José Cipriano Valencia, de 35 años, al cadáver hallado el pasado domingo a las 11:00 en el recinto El Capricho de la parroquia Borbón, cantón Eloy Alfaro, quien ha sido identificado como un “amigo” de la banda del Negro Holmer, uno de los delincuentes más buscados que fue detenido horas antes.

El cuerpo presentaba aproximadamente 50 impactos de bala y según sus familiares, este era amigo de los integrantes de la banda Los Mantecos, que tiene su base de operaciones en la parroquia Borbón.

Aunque la policía indica que la mayoría de las personas se niega a hablar por miedo a las represalias, en la provincia de Esmeraldas se corre la versión de que Cipriano fue ajusticiado por ser, presumiblemente, el informante que delató a la Policía a Holmer Cortez Ramírez, (a) Negro Holmer, versión que no ha sido confirmada.

Lo que sí se establece en el parte policial es que miembros de esta misma banda asesinaron a Cipriano, en lo que parece ser un acto de ajusticiamiento.

El ministro de Justicia, José Serrano, informó el pasado domingo que la captura de Negro Holmer se logró gracias a información entregada por un ciudadano a quien se le canceló el valor de la recompensa por la entrega.

Esto se da en medio de críticas de los jueces de Esmeraldas, que solicitaron al Comando de la Policía de Esmeraldas un permiso especial para portar armas de fuego, pero este pedido les fue negado. El juez Tercero de lo Penal de Esmeraldas, José María Mosquera, se excusó de conocer el caso y lo remitió a su similar del cantón Eloy Alfaro, jurisdicción donde se tramitará el juicio.

El juez José María Mosquera, quien también lleva el caso Resurgir donde fue apresado el excomandante de la Policía de Esmeraldas, coronel Galo Herrera, ha sido incluido en el programa de víctimas y testigos.

Pese a ello, el juez se quejó por el dispositivo de seguridad para su custodia y que pese a que existe temor él continuará con el proceso.
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